lunes, 31 de marzo de 2008

Cronos desestructurado XD

2 comentarios:

  1. Que cosa mas.... Chula?? Las cosas que se pueden encontrar por la calle. Me tengo que hacer con un minirreloj de pared... ya.. 8-)

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  2. Oda a un reloj en la noche
    Pablo Neruda


    En la noche, en tu mano
    brilló como luciérnaga
    mi reloj.

    su cuerda:
    como un susurro seco
    salía
    de tu mano invisible.
    Tu mano entonces
    volvió a mi pecho oscuro
    a recoger mi sueño y su latido.

    El reloj
    siguió cortando el tiempo
    con su pequeña sierra.
    Como en un bosque
    caen
    fragmentos de madera,
    mínimas gotas, trozos
    de ramajes o nidos,
    sin que cambie el silencio,
    sin que la fresca oscuridad termine,
    así
    siguió el reloj cortando
    desde tu mano invisible,
    tiempo, tiempo,
    y cayeron
    minutos como hojas,
    fibras de tiempo roto,
    pequeñas plumas negras.

    Como en el bosque
    olíamos raíces,
    el agua en algún sitio desprendía
    una gotera gruesa
    como una uva mojada.
    Un pequeño molino
    molía noche,
    la sombra susurraba
    cayendo de tu mano
    y llenaba la tierra.
    Polvo,
    tierra, distancia
    molía y molía
    mi reloj en la noche,
    desde tu mano.
    Yo puse
    mi brazo
    bajo tu cuello invisible,
    bajo su peso tibio,
    y en mi mano
    cayó el tiempo,
    la noche,
    pequeños ruidos
    de madera y de bosque,
    de noche dividida,
    de fragmentos de sombra,
    de agua que cae y cae:
    entonces cayó el sueño
    desde el reloj y desde
    tus dos manos dormidas,
    cayó como agua oscura
    de los bosques,
    del reloj
    a tu cuerpo,
    de ti hacia los países,
    agua oscura,
    tiempo que cae
    y corre
    adentro de nosotros.
    Y así fue aquella noche,
    sombra y espacio, tierra
    y tiempo,
    algo que corre y cae
    y pasa.
    Y así todas las noches
    van por la tierra,
    no dejan sino un vago
    aroma negro,
    cae una hoja,
    una gota
    en la tierra
    apaga su sonido,
    duerme el bosque, las aguas,
    las praderas,
    las campanas,
    los ojos.

    Te oigo y respiras,
    amor mío,
    dormimos.

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